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← Otras noticiasEntrevista al Dr. Félix González " La salud mental del palmero pasa por asegurarle una casa"
Martes, 19 de octubre de 2021
Entrevista realizada por José Domínguez, de El Correo, tras la Ponencia presentada por el Dr. Félix Gónzález en el XIV Congreso Nacional de ASEPP que tuvo lugar en Bilbao del 14 al 16 de octubre.
Félix González, Psiquiatra residente en la zona del volcán.
Este experto asegura que los mayores son los que peor llevan la pérdida de sus viviendas al sentir que no tendrán tiempo de recuperar sus vidas.
BILBAO. Hay vecinos que, «junto a su casa, han perdido su biografía, su propia historia y la de sus antecesores». Félix González resume con esta contundencia el estado de shock en el que se encuentran muchas víctimas del volcán de La Palma, y reconoce que hay que estar muy atentos a su evolución ante posibles casos de estrés postraumático, depresiones o incluso problemas mayores. Aunque, al mismo tiempo, cree que es pronto para valorar las consecuencias en su salud mental porque todavía quedan muchas incertidumbres por aclarar. Desde la impredecible duración de las erupciones a la rapidez con la que actúen las administraciones públicas porque, en opinión de este experto que participa en unas jornadas sobre covid y psiquiatría en la Sociedad Bilbaína, «la salud mental del palmero pasa por garantizarle una casa».
- ¿Qué ánimo percibe en la isla?
- Al residente en Aridane o El Paso se le ve triste, ha perdido expectativas e ilusiones. Su cara refleja la tensión y el desconcierto. Y el sueño. Muchos no pueden dormir, y cerca del volcán peor. El rugido es como el de un reactor a mil revoluciones a todas horas. Algunos incluso ya se han ido de la isla.
- Muchos hablan de la necesidad de superar un duelo interno.
- Suelen necesitarse seis meses al morir un ser querido. En este caso espero que sea menos porque, al margen de los daños materiales, no se ha perdido ninguna vida, y confío en que siga así.
- ¿A quienes ve peor?
- A los mayores, les invade la sensación de no tener tiempo para recuperar sus vidas. Y los que ya tenían algún trastorno depresivo, o una adición… Incluso estamos alerta en previsión de aumentos de suicidio, aunque de momento no vemos indicios que, en todo caso, podrían surgir si fallase la red de apoyo social , que está siendo encomiable, desde la familia a los amigos, los vecinos…
- La solidaridad con La Palma se ha extendido por todo el país.
- Es un respaldo enorme. La gente más afectada comprueba que no está sola y eso la ayuda mucho a mirar hacia delante.
- El propio pasado volcánico de la isla, ¿ayuda a sobrellevar mejor la situación?
- La mejor muestra es que los vecinos siguen saliendo cada día a la calle. Están aceptando que hay que convivir con las erupciones hasta que acaben. Yo mismo he vivido ya dos volcanes, mis padres otros dos, mis abuelos otros tantos… Ciertamente este legado puede estar ayudándonos a afrontar todo con más filosofía.
Atención gratuita ‘online’
- ¿Proliferarán los trastornos psíquicos entre los afectados?
- Es muy apresurado predecirlo. No sería realista. Depende de demasiadas cosas y de las propias personas. Unas sufren mucha ansiedad y otras lo llevan mejor. Estamos muy atentos para asistirlas en función de la demanda. Incluso las sociedades científicas de psiquiatría hemos diseñado un plan de atención gratuita ‘online’ para reforzar a los profesionales locales. Aunque el mejor tratamiento psicológico está en mano de las propias administraciones.
- ¿Cómo pueden ayudar los responsables políticos?
- Su papel es decisivo. La diligencia del Gobierno central será clave en la salud mental del palmero, porque lo primero y más urgente para él es lograr la tranquilidad de tener garantizado que, aunque haya perdido su casa, va a tener un nuevo hogar. Cerca o en otro punto de la isla, donde se considere más seguro. Y ese tema todavía no está resuelto.