¿Qué hace el 'Chef del Mar', Ángel León, en un congreso de Psiquiatría? El reconocido cocinero intervendrá hoy en una mesa sobre 'El proceso de la creatividad. Del mito a la realidad' en el marco del XI Congreso Nacional de la Asociación Española de Psiquiatría Privada que se celebra desde ayer en el hotel Jerez. Su participación se explica en el espíritu que los presidentes del comité organizador de la cita, los doctores Dionisio Romero y Juan Sánchez, han querido imbuir a unas jornadas cuyo título genérico, 'La psiquiatría, abierta a la sociedad', resume, en buena parte, su objetivo. "Ángel León viene a enseñarnos el proceso de su creación. Queríamos que viniesen personas ajenas a nuestra profesión al congreso y él es una persona muy creativa e interesante. Además cuando se decidió organizar el congreso en Jerez pensamos en personas relevantes de la ciudad". Junto al chef, Jesús J. De la Gándara Martín, jefe del servicio de Psiquiatría del hospital universitario de Burgos, aportará la nota científica abordando cómo funciona de forma diferencial el cerebro de aquellas personas que destacan por su creatividad, según explica Juan Sánchez.

En ese interés de los organizadores por acabar con las reservas que aún existen hacia la psiquiatría y abrir la especialidad a la sociedad se justifican algunos de los temas que se abordarán en el congreso hasta mañana sábado. "Tradicionalmente la medicina, en especial la psiquiatría es muy humanista, ligada a otras áreas del conocimiento, y también transversal. Queríamos traer la sociedad al congreso para que nos enriquezca . También es verdad que es una especialidad distinta, lo social, la vida en sí está muy entrelazada con nuestra especialidad y tratamos los problemas humanos aparte de los médicos". Y en el contexto de esa apertura y en un guiño a la ciudad anfitriona, la conferencia inaugural se dedicó a 'El vino de Jerez en la historia de la medicina. Consumiendo responsablemente', que estuvo a cargo del catedrático de Farmacología Juan Gibert y del presidente del Consejo Regulador, Beltrán Domecq.

Defienden los organizadores del congreso que la patología psiquiátrica es un reflejo del momento y de la situación que vive la sociedad y aunque no se puede hablar de nuevas enfermedades, sí de "enfermedades antiguas con nuevas dimensiones. Si hablásemos, por ejemplo, de adicciones en psiquiatría no tienen nada que ver con las de hace 20 años, ahora son más lo que se denominan adicciones conductuales, a internet, los móviles. La invasión de las redes sociales en la vida de las personas ha provocado una serie de peculiaridades", indica el doctor Sánchez. "Hubo también una patología de la crisis, e incluso los delirios de los pacientes actuales están más relacionados con los ordenadores, el control o que si les vigilan las máquinas", apostilla el doctor Romero.

Constatan además que acudir a sus consultas va dejando poco a poco de ser un tema tabú. "La gente habla más abiertamente de que va al psiquiatra, personas públicas que confiesan que han tenido una patología psiquiátrica y eso se nota", afirma este profesional, coincidiendo con su compañero. "Si antes el recurso del psiquiatra estaba destinado a la patología grave, ahora ante patologías menos graves, aunque evidentemente causan un sufrimiento intenso al paciente como la ansiedad, la depresión, las fobias, las obsesiones, acuden a las consultas porque ven la posibilidad de ser tratados eficazmente". En este sentido, el doctor Romero asegura que "solucionamos muchas más cosas de lo que la gente piensa y nuestros resultados son mejores que los de otras muchas especialidades. A veces escuchas que los psiquiatras no curan a nadie, pero bueno, menos curan los reumatólogos, los neurólogos.., nosotros tenemos un porcentaje importante de éxito".

En este proceso de acabar con muchas leyendas negras de la especialidad, como el uso que se hace de la farmacología, el doctor Sánchez afirma de forma contundente que hay prejuicios totalmente erróneos. "Los fármacos antidepresivos, por ejemplo, no tienen afectación sobre los órganos diana ni producen dependencia. Hay fármacos de los que utilizamos a diario que son más peligrosos, desde los que se toman para el colesterol a otros muy habituales". "Aquí ha habido muy mala prensa - añade Romero- Los pacientes están imbuidos de ese mensaje erróneo, el familiar que les recomienda que no tomen pastillas, que tiene efectos secundarios, que si crea dependencia, o que vas a dejar de ser tú mismo".

Inevitable también hablar de la depresión, que sin embargo estos profesionales entienden que no ha incrementado su número de casos, pero sí de diagnósticos. "Está claro que hace años había un infradiagnóstico de la patología psiquiátrica. Ahora se diagnostica más. Se estima que una de cada cuatro personas va a tener un cuadro depresivo a la largo de su vida, pero no creemos que sea alarmante porque tenemos soluciones".

A lo largo del congreso tienen también cobertura temas novedoso como los retos del psiquiatra ante las nuevas formas de delincuencia abordándose tanto la ciberdelincuencia como los delitos sexuales. "Hablamos de delitos que están muy de actualidad y que nos afectan en nuestra faceta de peritos en determinados juicios. Nuestra labor es clínica pero también de auxilio a la justicia y esto nos puede llevar a tener que peritar, tanto de oficio como de parte, casos de este tipo. De ahí el interés que tenemos en explorar estos temas".

Otra de las mesas abordará el papel de la nutrición en la salud mental. Destaca el doctor Sánchez que existe mucha investigación sobre cómo afecta la nutrición al comportamiento y al estado de ánimo. "Se están utilizando y hay evidencias científicas de que la alimentación macrobiótica puede ayudar a resolver algunos casos enconados de depresión y para hablar de ello contaremos con una experta en el tema. Claramente somos lo que comemos". Defiende además lo que la psiquiatría puede aportar en los trastornos nerviosos que acaban somatizándose. "Hay pacientes con dolencias físicas que recurren a nosotros después de haberse recorrido un buen número de médicos. En ese sentido los psiquiatras podemos aportar no sólo el tratamiento farmacológico, sino también una visión desde la parte médica, desde la parte más holística".

Los organizadores resaltan por último la mesa dedicada a la toma de decisiones compartidas en el tratamiento en salud mental, en la que se defenderá el papel del paciente y su participación en las decisiones a adoptar, lejos del paternalismo e incluso imposición de los antiguos psiquiátricos.

Ejercicio privado con vocación pública

Mantener en el ejercicio de la psiquiatría los principios de la buena praxis médica, fundamentada en el humanismo o la intervención a nivel social, con el fin de eliminar el estigma de la enfermedad mental y luchar por la mejor integración del paciente son dos de los objetivos del decálogo de la Asociación Española de Psiquiatría Privada, un nombre que el doctor Juan Sánchez aclara no debe llevar a equivocación. "Cuando se habla de privada puede parecer algo elitista y nada más lejos de eso. Nosotros estamos haciendo una labor social y pública de muchas maneras". En este sentido, argumenta la atención que se presta al ciudadano ante las listas de espera en la pública y también la asistencia a funcionarios y otros profesionales a través de las mutuas. "La atención en los servicios de Salud Mental públicos es excelente, pero es verdad que están más dedicados a los trastornos mentales graves. Por eso nunca hablamos de competencia sino de convergencia y complementariedad con la psiquiatría pública".